En Paiporta, Valencia, agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, junto con la Unidad Militar de Emergencias, continúan buscando desaparecidos en fosos de construcciones nuevas y aparcamientos de grandes comercios, inundados por las lluvias. Los equipos se abren paso entre el barro, revisando vehículos inmersos, en busca de posibles cadáveres. Residentes de zonas cercanas a la A-3, impactados por la destrucción que ha provocado el desbordamiento del barranco del Poyo, han solicitado urgentemente grúas y maquinaria pesada. Entre ellos, Sofía, quien describe la escena como un cúmulo de automóviles completamente aplastados e irreconocibles, insistiendo en la necesidad de equipos para rescatar más vehículos sepultados.
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