La consejera de Cultura y Deporte, Patricia del Pozo, y el rector de la Universidad Pablo de Olavide, Francisco Oliva, han suscrito un protocolo para desarrollar acciones destinadas a la prevención de incendios y daños en museos y conjuntos culturales de Andalucía. Esta colaboración, con una vigencia de cuatro años, permitirá reforzar la labor de ambas instituciones en la protección del patrimonio histórico, incluyendo la creación de nuevos planes de salvaguarda, la realización de simulacros y el impulso de proyectos de I+D+i relacionados con esta materia.
La conservación del extenso patrimonio de Andalucía, que cuenta con numerosos bienes protegidos y ocho conjuntos arqueológicos y monumentales inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial por la Unesco, es una prioridad. Por ello, disponer de protocolos de actuación y herramientas para prevenir daños resulta fundamental. Las nuevas líneas de actuación se centrarán en el impacto de los fenómenos meteorológicos y en cómo reducir los daños que provocan inundaciones, terremotos, incendios y otros eventos catastróficos. La meta es mitigar el deterioro durante una emergencia, evitando la pérdida total o parcial de elementos protegidos, con el consiguiente ahorro económico y reducción del impacto social.
La alianza con la Universidad Pablo de Olavide permitirá aprovechar sinergias y avanzar en los proyectos de investigación y difusión para la conservación del patrimonio tras incendios o desastres naturales que ya están en marcha. La institución académica ha desarrollado un software para el rescate de obras patrimoniales, en colaboración con el Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i) y Mission Track. Esta herramienta informática permite localizar en todo momento cada elemento a conservar, determinar qué equipo debe intervenir y seguir la trazabilidad del restaurador, junto con las decisiones tomadas por el equipo tras la emergencia.
Durante los últimos tres años, la Consejería de Cultura y Deporte ha colaborado en estas iniciativas mediante asesoramiento y participación en distintas actividades. Con el recién suscrito protocolo, la Consejería reafirma su compromiso facilitando documentación, espacios y recursos humanos para la redacción de planes de prevención en museos y conjuntos culturales, y la realización de simulacros. También apoyará la publicación de los resultados de los proyectos en congresos nacionales e internacionales y en revistas de impacto, y colaborará en acciones de formación y difusión.
Por su parte, la Universidad Pablo de Olavide asumirá la función de seleccionar las zonas de interés para elaborar los planes de prevención y los simulacros, y evaluará las posibilidades de su software para el análisis de riesgos y la respuesta ante emergencias. La institución organizará talleres de trabajo interdisciplinar y asesorará al personal técnico de la administración en la actuación ante situaciones de riesgo o catástrofes.
El protocolo se desarrollará inicialmente en el Conjunto Arqueológico de los Dólmenes de Antequera (Málaga). Se creará una comisión de seguimiento para coordinar los trabajos conjuntos y realizar un control de las acciones planteadas. Este protocolo tendrá una vigencia inicial de cuatro años, con posibilidad de prórroga por cuatro años adicionales.
Fuente: Junta de Andalucía.