El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha permitido que el gobierno de Donald Trump prohíba a las personas trans servir en el Ejército, revocando decisiones de tribunales inferiores. Esta medida surge tras una orden ejecutiva de Trump, que revertía una iniciativa del expresidente Biden que permitía su inclusión. La decisión generó disconformidad entre las juezas progresistas, pero no se presentaron argumentos detallados. Entre los afectados está la comandante Emily Shilling, quien ha servido en Irak y Afganistán, y cuya expulsión se considera injustificada por algunos jueces. La Casa Blanca celebró la decisión como un avance hacia un Ejército más centrado en la preparación que en la diversidad. Esta situación deja a miles de soldados trans en riesgo de ser destituidos mientras la política de inclusión sigue en tensión.
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