Un juicio en curso podría resultar en severas condenas para los acusados, quienes enfrentan cargos que conllevan penas de entre 15 años de prisión y cadena perpetua. Este caso ha captado la atención pública debido a la gravedad de las acusaciones y el impacto potencial en las vidas de los involucrados, además del precedente legal que podría establecer. La sentencia final dependerá de la valoración de las pruebas presentadas y de la interpretación de las leyes aplicables en cada caso específico.
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