La dirigente socialista Isabel Miralles, ex secretaria general de la agrupación más grande del PSOE en Palma, asegura haber experimentado miedo durante una reunión con Iago Negueruela, secretario general del partido. Negueruela, sin pruebas, acusó a Miralles de instigar una conspiración porque no renunció a su candidatura para liderar la junta local, presionándola con un tono agresivo que le causó un ataque de ansiedad. Miralles denunció estos hechos a la dirección socialista de Mallorca, señalando que tal comportamiento podría tener connotaciones machistas, pero afirma que no se ha investigado suficientemente. A pesar del apoyo de la militancia, no se presentó a la reelección, facilitando así que Negueruela designara a su aliado Ramon Perpinyà.
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