Con la llegada del invierno, los Pirineos se erigen como uno de los destinos más deseados para los amantes de la nieve y los deportes de montaña. En este entorno privilegiado, el Hotel Esquirol, ubicado en la pintoresca localidad de Llívia, aparece como una opción imprescindible para quienes buscan cómodas instalaciones y cercanía a las principales estaciones de esquí de la región.
Situado en un enclave singular, Llívia es una localidad que, curiosamente, está rodeada por territorio francés pese a pertenecer a España. Esta posición estratégica permite a los visitantes del Hotel Esquirol disfrutar de la Cerdanya en ambos lados de la frontera, con acceso rápido a destinos como Masella, La Molina, Font Romeu, Les Angles e incluso Granvalira, todos a menos de 40 kilómetros.
El Hotel Esquirol, parte del prestigioso Grupo Esquirol, conocido también por su Restaurant Esquirol y la Taverna del Call en Puigcerdà, se distingue por combinar la cálida hospitalidad pirenaica con la ventaja de encontrarse cerca de las pistas más populares. Los huéspedes pueden adquirir forfaits directamente en la recepción, evitando así las largas filas y maximizando su tiempo en la nieve.
Edu Vidal, gerente del hotel, subraya: «Con el invierno a las puertas, nuestro objetivo es que cada huésped viva una experiencia inolvidable desde su llegada». El hotel no solo facilita la compra de forfaits, sino que también cuenta con un equipo dispuesto a ofrecer asesoramiento sobre las mejores pistas según las condiciones climáticas actuales. Además, los visitantes pueden beneficiarse de un espacio dedicado para el almacenamiento de esquís y equipamiento, así como de promociones exclusivas disponibles en su página web.
Después de una jornada repleta de acción en las pistas, el ambiente familiar y acogedor del Hotel Esquirol ofrece el refugio perfecto para el descanso. Su asociación con el Grupo Esquirol asegura una experiencia culinaria excepcional, que mezcla lo mejor de la tradición local con sabores únicos de la Cerdanya.
El compromiso del Grupo Esquirol con la calidad en servicios y atención personalizada ha cimentado su fama como una de las mejores opciones en el ámbito turístico y gastronómico de la región. Aquellos que eligen alojarse en el Hotel Esquirol encuentran no solo un lugar para dormir, sino un verdadero hogar en el corazón de los Pirineos, desde donde comenzar su aventura invernal.