Inicio Tecnología Dron con Sensores de Olfato Revoluciona Monitoreo en Plantas de Tratamiento de...

Dron con Sensores de Olfato Revoluciona Monitoreo en Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales

0
María MR

Los olores en las plantas de tratamiento de aguas residuales, tradicionalmente medidos mediante olfatometría dinámica—donde un panel humano huele y analiza bolsas de aire recogidas—pueden convertirse en un problema costoso, lento e infrecuente. Este método, aunque considerado de referencia, dificulta la capacidad de respuesta de los operarios y la localización precisa de las fuentes de hedor.

Ahora, investigadores del Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC) han desarrollado una innovadora solución: una nariz electrónica portátil (e-nose) montada sobre un dron. Este dispositivo, con un peso de 1,3 kg, aspira aire a través de un delgado tubo de diez metros para tomar muestras en zonas no perturbadas por los rotores del dron. Los resultados del estudio han sido publicados en la revista iScience.

Santiago Marco del IBEC, autor principal del estudio, explica que la e-nose consiste en una matriz de sensores químicos y un sistema de análisis de datos basado en aprendizaje automático que predice la intensidad del olor de manera similar a un panel humano.

La nariz electrónica ha sido entrenada para identificar compuestos químicos típicos en aguas residuales, como sulfuro de hidrógeno (huele a huevos podridos), amoníaco (huele a orina) y dióxido de azufre (huele a cerillas quemadas). También incluye un sensor de dióxido de carbono para detectar la actividad bacteriana.

Gracias a la movilidad del dron y a un avanzado algoritmo de inteligencia artificial, el equipo del IBEC ha podido mapear la concentración temporal y espacial de los olores en distintas áreas de la planta. Esto permite, por primera vez, prever la intensidad de los olores a partir de las mediciones.

El objetivo último de esta tecnología es proporcionar a los operadores de las plantas de tratamiento de aguas residuales herramientas para minimizar el impacto de los malos olores en los vecindarios cercanos. María Deseada Esclapez, investigadora de Depuración de Aguas del Mediterráneo, operadora de la planta de Molina de Segura (Murcia) donde se ha probado el sistema, resalta la importancia de predecir la intensidad de los olores percibidos por los humanos.

“Estamos muy contentos con los resultados, pero necesitamos más validación y robustez para la operación real en planta,” reconoce Marco. El equipo de investigadores planea optimizar el dispositivo frente a variables ambientales como la temperatura y la humedad.

La aplicación potencial de esta tecnología no se limita a plantas de tratamiento de aguas residuales, sino que también podría ser útil en vertederos, plantas de compostaje e incluso grandes granjas de ganado conocidas por producir malos olores.

El estudio “RHINOS: A lightweight portable electronic nose for real-time odour quantification in wastewater treatment plants” ha sido publicado en iScience. Derechos y fuente de la información: Creative Commons y Agencia Sinc.

Salir de la versión móvil