El reciente aumento en el precio de los huevos en los supermercados de España se ha convertido en un tema de preocupación tanto para los consumidores como para los economistas, dado que refleja una tendencia inflacionaria que afecta a varios productos básicos. Según un estudio realizado por FACUA-Consumidores en Acción, el incremento más notable se ha registrado en Mercadona, donde el costo de los huevos ha experimentado una subida media del 19,6 %.
Esta alza en los precios se debe a varios factores, incluyendo el aumento en los costos de producción y el encarecimiento de los piensos para gallinas, así como la inflación generalizada en productos básicos. Mercadona ha liderado estos incrementos, con un cambio significativo en el precio de la docena de huevos medianos M de la marca Huevos Guillén SL, que pasó de costar 2,08 € a 2,60 €, lo que representa un aumento del 25 %.
Carrefour y Dia también han ajustado sus precios al alza, con incrementos promedio del 16,2 % y 13,8 % respectivamente. En Carrefour, la docena de huevos frescos El Mercado calibre L-XL ha visto un aumento del 40,8 %, mientras que en Dia, la docena de huevos frescos clase M de marca propia ha subido un 24 %.
Además, otras cadenas como Hipercor y Eroski han registrado incrementos, aunque más moderados. Hipercor ha subido el precio de los huevos un 6,4 %, mientras que Eroski ha registrado una media de aumento del 10 %. Alcampo, por su parte, se ha mantenido como la cadena con el menor incremento, incluso reduciendo algunos precios, con un caso particular de la docena de huevos camperos Corral de Monegros M-L que ha disminuido un 24 %.
FACUA ha monitoreado estas alteraciones a través de visitas a supermercados y mediante su plataforma super.FACUA.org, que permite a los consumidores observar la evolución de los precios. Este aumento de los huevos es parte de una tendencia inflacionaria más amplia que afecta a los productos básicos y tiene un impacto directo en el presupuesto familiar, variando significativamente entre distintos supermercados.
La subida de precios no solo es un reflejo del panorama económico actual, sino también un indicador de cómo factores globales y nacionales pueden influir en la economía doméstica, afectando a productos esenciales y, por ende, a los consumidores a nivel general.