El Gobierno español ha destinado 13.977 millones de euros de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) a programas de defensa, superando en 16% lo inicialmente previsto para esta partida, según la Airef. Este monto, representando el 0,9% del PIB de 2024, se desglosa en un 70% para las fuerzas armadas, cubriendo salarios, adquisiciones e inversiones, y un 30% para la administración de la defensa. La ejecución presupuestaria revela cifras ligeramente superiores, con 14.986 millones en obligaciones reconocidas. El gasto incluye 6.859 millones en inversiones reales, como equipos y armamento, y 5.649 millones en nóminas y prestaciones. Existen discrepancias en la medición del desembolso en defensa, con distintas metodologías usadas por Airef, la contabilidad nacional, y la OTAN, cada una reflejando diferentes porcentajes del PIB. Mientras que el cálculo europeo se centra en el gasto comprometido, la OTAN incluye otros aspectos como pensiones militares, estimando un desembolso de 19.723 millones para 2024, un 1,3% del PIB, aún por debajo del objetivo del 2% acordado con la alianza.
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