Miguel Uribe Turbay, senador colombiano y precandidato presidencial de 39 años, falleció tras 65 días en cuidados intensivos luego de sufrir un atentado en Bogotá. Su muerte revive el trauma de décadas pasadas cuando varios candidatos presidenciales fueron asesinados. Aunque el sicario adolescente y otros implicados han sido capturados, aún se desconoce quién orquestó el crimen, dejando al país en una atmósfera de incertidumbre a pocos meses de las elecciones. La situación se agrava con la reciente condena a Álvaro Uribe Vélez, líder de la derecha, lo que ha intensificado las tensiones políticas. Mientras tanto, el presidente Gustavo Petro y otras figuras políticas han llamado a la calma en un contexto donde las tesis sobre los responsables del atentado varían, desde nuevas organizaciones narcotraficantes hasta disidencias armadas. La incertidumbre sobre el futuro político sigue creciendo en Colombia.
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