El Senado de Estados Unidos ha confirmado a Robert F. Kennedy Jr., sobrino del expresidente, como nuevo secretario de Sanidad, pese a las controversias sobre sus opiniones antivacunas y su defensa de la leche cruda, entre otras. El activista pasó de rival electoral a aliado de Donald Trump, retirando su candidatura independiente en agosto tras asegurar un puesto en el gabinete del expresidente. Aunque Kennedy ha prometido «seguir la ciencia» en seguridad de vacunas y enfrentar la epidemia de enfermedades crónicas, sus respuestas no han convencido del todo, manteniendo su postura crítica frente al consenso científico sobre las vacunas. La mayoría de los republicanos, excepto el senador Mitch McConnell, apoyaron su confirmación, pese a la oposición unánime de los demócratas que cuestionan su capacidad para liderar el Departamento de Salud y Servicios Humanos.
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