El príncipe Harry expresó en una entrevista con la BBC su deseo de reconciliarse con su familia, motivado por el temor ante la enfermedad de su padre, el rey Carlos III, diagnosticado con cáncer y sometido a sesiones de quimioterapia. Harry mencionó que su relación con Carlos está fracturada debido a la negativa paterna de reinstaurar su equipo de protección policial en el Reino Unido, lo que atribuye a un «arreglo del establishment». Aunque reconoce que algunas de sus decisiones anteriores, como la publicación de su libro, afectaron a su familia, Harry insiste en que la reconciliación debe basarse en la verdad. Sin embargo, su frustración aumenta tras perder un caso judicial sobre seguridad, lo cual considera un obstáculo para regresar al Reino Unido con su familia. El Palacio de Buckingham ha reafirmado que la justicia ha desestimado sus peticiones repetidamente.
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