El Tusi: La Droga del Marketing que Desnuda la Depresión Colectiva de la Sociedad Moderna

El fenómeno del tusi, una droga sintética originaria de Colombia, ha evolucionado como un intrincado y peligroso coctel conocido por su apariencia rosada y su origen oculto bajo marcas de lujo como «Calvin Klein» y «Coco Chanel». Este estupefaciente engañosamente llamativo está compuesto principalmente por ketamina y MDMA, entre otras sustancias, que ofrecen una experiencia que oscila entre el adormecimiento y la euforia. El tusi ha trascendido sus inicios en las fiestas de guaracha, marcando un cambio en la cultura del narcotráfico hacia un modelo más descentralizado y de fácil producción, donde el «dealer» actúa como un sofisticado emprendedor. Sin embargo, la incertidumbre sobre su composición y la falta de conciencia sobre sus efectos a largo plazo, como los daños neurológicos y a la vejiga, plantean serios desafíos de salud pública. Este polvo rosado, ahora emblema de una cultura hedonista y desencantada, se impone como reflejo de las tensiones socioeconómicas de las generaciones jóvenes.

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