El diseño de un jardín en casa es una práctica que combina belleza y sostenibilidad, y en este sentido, las plantas perennes están ganando popularidad por su capacidad de florecer año tras año sin replantación. Aquí exploramos siete especies que aportarán vitalidad y color a su jardín durante varias temporadas.
Empezamos con la lavanda, conocida por sus flores moradas y su inconfundible aroma. Además de su atractivo estético, esta planta atrae polinizadores y es especialmente resistente en climas cálidos y secos.
La echinacea, también llamada susana de ojos negros, resalta por sus pétalos en tonos rosados, púrpuras y blancos. Además de su belleza, ofrece beneficios medicinales y es muy atractiva para las mariposas.
El lirio de día es otra opción fascinante, ya que sus flores abren con el amanecer y se cierran al anochecer. Su variedad de colores aporta alegría a cualquier rincón del jardín.
La salvia no solo embellece con flores azules y violetas, sino que también es útil en la cocina. Esta planta aromática favorece a los polinizadores y realza el entorno.
Con sus elegantes flores en forma de campana, la campanula es adaptable a diversos suelos y florece durante largos períodos, añadiendo un toque de distinción al jardín.
El aster, famoso por su floración otoñal, ofrece color en una época en que otras plantas empiezan a decaer. Sus flores, en tonos morados, rosas o blancos, son un imán para aves y mariposas.
Por último, la hosta, ideal para áreas de sombra, se distingue por su exuberante follaje y flores en racimo, proporcionando textura y durabilidad al espacio verde.
Integrar estas plantas perennes no solo enriquecera estéticamente su jardín, sino que también fomentará un ecosistema saludable, atrayendo polinizadores y asegurando un entorno vibrante y sostenible. Con el cuidado adecuado, estas especies se convertirán en un pilar fundamental de su jardín, demostrando el poder transformador de la naturaleza en su hogar.