En el corazón de Roma, el Circo Máximo se convirtió en el escenario de una procesión magna con tallas religiosas de Italia, Portugal, Francia y España, en el marco del Año Jubilar. El evento, impulsado por el Papa Francisco y mencionado por el nuevo Papa León XIV, destacó la devoción popular y fue seguido con gran expectativa por medios especializados. Las imágenes, incluyendo la Semana Santa andaluza y el Nazareno de León, capturaron momentos únicos ante miles de devotos y turistas. Autoridades como la vicepresidenta española, María Jesús Montero, y el presidente andaluz, Juanma Moreno, asistieron al evento. Sin embargo, la lluvia interrumpió el desfile, ante la incredulidad de los romanos y turistas. Destacadas figuras del espectáculo tampoco faltaron, mientras la ciudad, cargada de eventos vaticanos recientes, mostraba signos de agotamiento.
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