El expresidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, se reafirmó en sus críticas hacia el rey emérito Juan Carlos I al llegar al acto de conciliación en Santander. Revilla sostiene que sus opiniones reflejan las de muchos españoles y anticipa que el caso podría terminar en juicio. Durante su declaración, manifestó que el monarca debería pedir perdón y repatriar su dinero en el extranjero. A pesar de su pasado apoyo al rey, Revilla expresó haber sido decepcionado por su comportamiento reciente. Tranquilo y agradecido por el apoyo público, Revilla enfrenta una demanda del rey emérito por injurias, quien reclama 50,000 euros y una rectificación pública. Las declaraciones de Revilla, calificando al rey de «evasor» y «corrupto», se repitieron en diversos medios desde 2022.
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