Fallos recurrentes en las máquinas de recaudación de la EMT de Palma obligan a los chóferes a llevarse el dinero a casa, creando inseguridad y estrés. Estos problemas se han agravado en los últimos meses debido a la inoperatividad constante de las cinco máquinas autorrecaudadoras en las cocheras, las cuales deberían funcionar 24/7 y están conectadas al sistema contable de la empresa. Aunque los conductores tienen un plazo de 24 a 48 horas para liquidar la recaudación, las fallas les obligan a esperar hasta cinco días, sin que se ofrezca una solución alternativa. La empresa que gestiona el mantenimiento de estas máquinas, y que recibe más de medio millón de euros, no ha cumplido con los tiempos de respuesta exigidos, complicando aún más la situación de los trabajadores.
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