La Free Software Foundation (FSF) celebra su 40.º aniversario con importantes anuncios que apuntan a consolidar su misión de defender la libertad de los usuarios en el ámbito digital. En el evento conmemorativo, la organización presentó a Ian Kelling como nuevo presidente y desveló ambiciosos proyectos como el LibrePhone y una hoja de ruta hacia 2026 centrada en la inteligencia artificial y la comunidad.
Ian Kelling asumió el cargo con la promesa de fortalecer la capacidad de la FSF para enfrentar nuevas amenazas y atraer a más personas al movimiento. En una sesión inaugural moderada por figuras clave como Richard M. Stallman y Gerald Jay Sussman, se reafirmó el objetivo fundacional de garantizar que el software pueda usarse, estudiarse, modificarse y compartirse libremente, señalando las amenazas que presentan los ecosistemas móviles cerrados y las IA no auditables.
Zoë Kooyman, directora ejecutiva de la fundación, anunció la iniciativa LibrePhone, que busca trasladar los principios del software libre al ámbito móvil. El objetivo es minimizarlas dependencias propietario proporcionando una experiencia que funcione con hardware compatible y cadenas de herramientas reproducibles, además de fomentar colaboraciones con proyectos existentes para evitar esfuerzos duplicados.
En el aspecto de la inteligencia artificial, la FSF prepara criterios públicos para evaluar proyectos de aprendizaje automático, centrándose en licencias, trazabilidad, reproducibilidad y auditoría real. Esto busca brindar un marco ético‐técnico que supere la simple etiqueta de «open».
La estrategia de la FSF también incluye reforzar los eventos locales a través de la iniciativa LibreLocal, destacando la importancia de grupos pequeños con objetivos concretos para impulsar la educación y la comunidad «maker».
El evento culminó con un panel sobre alianzas estratégicas con organizaciones como EFF, F-Droid y Sugar Labs. Estas colaboraciones reforzarán la defensa de los derechos digitales, la promoción de competencias digitales libres y la distribución móvil abierta.
Para el sector tecnológico, estas iniciativas son cruciales para asegurar que la libertad de cómputo no quede relegada solo al escritorio. Con LibrePhone, la FSF busca garantizar que los dispositivos móviles también sean espacios de libertad para los usuarios. Asimismo, los criterios claros para IA ofrecerán una referencia esencial para instituciones y startups que buscan alinear innovación con libertad.
El aniversario de la FSF no solo fue una celebración, sino una llamada a la acción. Con la mirada puesta en el móvil y la inteligencia artificial, la fundación pretende transformar sus principios en productos tangibles y fomentar una comunidad sostenible que continúe luchando por la libertad del usuario en el mundo digital.