Google ha hecho oficial lo que hasta ahora solo eran especulaciones: la fusión de Chrome OS y Android en una única plataforma. Este movimiento, anunciado por Sameer Samat, presidente del ecosistema Android, durante el evento Google I/O 2025, busca terminar con la fragmentación y promover una innovación cruzada en dispositivos como portátiles y móviles.
Este cambio estratégico busca competir directamente con el ecosistema de Apple, donde sus dispositivos operan de manera integrada. Con la unificación de sus sistemas, Google planea reducir la duplicidad en el desarrollo y ofrecer una experiencia uniforme entre diferentes dispositivos, desde teléfonos hasta gafas inteligentes XR.
La transición parece indicar que Chrome OS se migrará hacia Android, aprovechando las avanzadas capacidades de Android 16, como la gestión de ventanas y la adaptabilidad a pantallas grandes. Con tecnologías como Trunk Stable, Google ha conseguido acelerar las actualizaciones, facilitando la sincronización de ciclos de vida entre dispositivos móviles y portátiles.
Central en esta estrategia es Gemini, el asistente de IA de Google, diseñado para ofrecer una asistencia intuitiva y en tiempo real. Capaz de analizar y resumir información de diversas fuentes, Gemini está integrado en Android 16 y será fundamental en la nueva plataforma unificada.
Si bien queda la incógnita sobre el futuro de los dispositivos con Chrome OS, se anticipa una transición gradual para los fabricantes. Se especula que los Chromebooks futuros podrían operar bajo un Android modificado, incorporando elementos de Chrome OS.
Google sigue los pasos de Apple y su modelo de ecosistema cerrado, pero con la ventaja de una plataforma más abierta, presente en miles de millones de dispositivos a nivel mundial. Esta estrategia también podría acelerar el desarrollo de experiencias inmersivas como Android XR.
El momento de la unificación es crucial, especialmente con la aparición de Android 16 y la presión de Apple en el mercado. Google entiende que la integración de tecnologías es la verdadera batalla, moviendo el foco de la innovación a la cohesión de sus dispositivos.
Para los usuarios, esto implica una experiencia más coherente entre dispositivos, un desarrollo unificado y una presencia robusta de IA en sus vidas cotidianas. Aunque esto podría significar el fin de Chrome OS tal como lo conocemos, la transición promete ser suave.
La confirmación de este movimiento establece un nuevo capítulo para Google, enfocándose en un ecosistema convergente, competitivo y sin fisuras frente a su mayor rival, Apple. Con Gemini y la convergencia de dispositivos, el futuro de Google se proyecta más allá de lo móvil, hacia una integración total.