El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha condenado las controvertidas declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien afirmó que su país está comprometido a «comprar y poseer» la Franja de Gaza tras el conflicto con Israel. Izat al Rishq, alto cargo político de Hamás, rechazó estas palabras, calificándolas de «ignorancia profunda» sobre la región y enfatizando que Gaza no es una propiedad en venta, sino parte integral de Palestina. Además, enfatizó que los palestinos solo saldrían del enclave para regresar a sus hogares ocupados por Israel desde 1948. Trump sugirió reconstruir el área con la ayuda de otros Estados de Oriente Próximo, describiendo el lugar como un «sitio de demolición», e indicó su plan de convertir la región en una ‘Riviera de Oriente Próximo’, lo que provocó un firme rechazo de Hamás al tratar el conflicto con una «mentalidad de agente inmobiliario».
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