En la recta final hacia las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Kamala Harris y Donald Trump intensifican sus campañas en los estados clave. Harris, tras un multitudinario acto en Washington, ha planeado una serie de mítines en Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin, buscando atraer al electorado latino con la participación de artistas mexicanos. Por su parte, Trump ha utilizado un polémico simbolismo al presentarse con un chaleco de basurero, criticando a Biden por un malentendido en referencia a sus seguidores. Ambos candidatos, centrados en estados decisivos como Wisconsin, Michigan y Pensilvania, buscan consolidar su apoyo antes del día de las elecciones. Harris apunta a fortalecer el llamado «Muro Azul», mientras que Trump opta por mítines sorpresivos en territorios demócratas, anticipando un posible desenlace en Pensilvania.
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