La política conservadora Sanae Takaichi ha sido elegida para presidir el Partido Liberal Demócrata (PLD) de Japón, con lo que se perfila como la posible nueva primera ministra del país, un hecho sin precedentes para una mujer en Japón. Takaichi derrotó al ministro de Agricultura, Shinjiro Koizumi, en la contienda interna del partido. La designación de Takaichi, una discípula política del ex primer ministro Shinzo Abe, requiere aprobación parlamentaria, aunque se anticipa su confirmación dada la alianza del PLD con el partido Komeito. Su liderazgo coincide con una fase de inestabilidad política en Japón, agravada por el descontento popular y el auge de formaciones populistas. Takaichi deberá afrontar desafíos significativos, como la inflación y la delicada relación con Estados Unidos tras los acuerdos comerciales impuestos por la administración Trump.
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