España enfrenta un desafío fiscal en el sector aéreo, según un informe de Transport & Environment (T&E) presentado en el Congreso. A diferencia de países como Francia y Alemania, que ya gravan los billetes de avión, España mantiene un «privilegio fiscal» que resulta en una pérdida de ingresos de 4.600 millones de euros anuales. T&E propone introducir un recargo moderado a los billetes que generaría hasta 2.800 millones de euros desde 2026, alineando a España con estándares europeos. Además, se destaca la falta de impuestos al queroseno y la baja tributación del IVA en billetes internacionales, factores que agravan la situación. T&E también insta a implementar impuestos a los jets privados y fomentar la producción de combustibles sostenibles. Proponen usar los nuevos ingresos fiscales para apoyar proyectos de eSAF y asegurar la transición verde de la aviación española.
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