El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, termina su mandato sin lograr el objetivo de ser reelegido para un segundo término. Presionado por preocupaciones sobre su salud y edad, Biden fue persuadido por su partido para ceder su candidatura a su vicepresidenta, Kamala Harris. Sin embargo, el candidato republicano, Donald Trump, ganó las elecciones y asumirá la presidencia el 20 de enero. En sus últimas semanas en el cargo, Biden ha implementado una serie de medidas para cementar su legado, incluyendo sanciones económicas a Rusia, apoyo financiero a Ucrania, un acuerdo de venta de armas a Israel, y la eliminación de Cuba de la lista de países que promueven el terrorismo. Además, ha conmutado sentencias y condonado deudas estudiantiles para beneficiar a miles de ciudadanos. Biden también firmó una ley para aumentar las pensiones de empleados públicos y prohibió nuevas perforaciones de petróleo en los océanos, buscando dificultar su revocación por la administración entrante. A pesar de estos esfuerzos, su mandato finaliza bajo la sombra del retorno de Trump y un intento fallido de perdón a su hijo Hunter.
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