Conor McGregor ha anunciado que no se presentará a las elecciones presidenciales de Irlanda, señalando una «caza de brujas» tras la ratificación de su condena por violación. A través de sus redes sociales, el exluchador expresó su descontento con el sistema político irlandés, refiriéndose a una Constitución desactualizada y la influencia del establishment para controlar las candidaturas. McGregor destacó su papel en movilizar un cambio político positivo a pesar de los obstáculos y dejó en claro que su compromiso con Irlanda persiste, prometiendo volver a la arena política en el futuro para luchar por los derechos de la nación. Asegura que su viaje político apenas comienza, comprometiéndose a representar los intereses irlandeses tanto a nivel nacional como internacional.
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