La ciberdelincuencia está alcanzando cotas alarmantes en Europa, con España a la cabeza de este preocupante fenómeno. Un reciente informe del Ministerio del Interior revela que el país ha registrado 472.125 delitos informáticos en 2023, lo que refleja un incremento del 18,9 % respecto al año anterior. Estos delitos afectaron a 354.610 personas, con los fraudes informáticos situándose entre las prácticas criminales más habituales, junto a amenazas y coacciones.
En medio de este escenario, la empresa española Block Traceability emerge como un baluarte en el rastreo de criptomonedas robadas. Con una impresionante tasa de éxito del 95 %, la firma ha recuperado más de 100 millones de dólares resolviendo más de 500 casos. Su enfoque innovador incluye la elaboración de informes forenses y planes de acción personalizados para las víctimas, facilitando la recuperación de fondos.
La cooperación internacional también ha dado pasos significativos. Las autoridades de España y los Países Bajos han incautado 17 millones de dólares en criptomonedas vinculadas a actividades fraudulentas y de blanqueo. Los métodos empleados por los ciberdelincuentes para eludir la detección incluyen transacciones fuera del mercado y el uso de wallets fríos.
Por otro lado, el Centro Criptológico Nacional ha identificado el phishing como una de las tácticas clave de los delincuentes. Mientras tanto, el Departamento de Seguridad Nacional advierte que los fraudes en línea son la forma de ciberdelito más prevalente, junto con el skimming.
A nivel mundial, el Informe IC3 2024 del FBI ha registrado más de 800.000 quejas por ciberdelitos, con pérdidas ascendiendo a 16.600 millones de dólares, lo que supone un aumento del 33 % respecto al año anterior. De estas pérdidas, 9.300 millones se atribuyen a estafas con criptomonedas, subrayando la necesidad urgente de medidas preventivas.
Un artículo académico reciente, publicado en la Revista de Estudios Europeos, examina cómo el blockchain puede servir como prueba en procesos penales transfronterizos, destacando su capacidad para preservar evidencias digitales. Este enfoque es coherente con los servicios de Block Traceability, cuyos informes forenses tienen validez legal gracias a la tecnología blockchain.
Alexandre Graux, portavoz de la empresa, subraya la importancia de una acción rápida: «La acción inmediata es crucial. Los informes forenses permiten a abogados y víctimas iniciar procesos de recuperación de forma segura». Block Traceability ofrece además evaluaciones gratuitas a las víctimas, brindando un apoyo esencial a individuos, despachos legales y empresas afectadas por la delincuencia relacionada con criptomonedas. Con su destacada tasa de éxito, la empresa se consolida como una herramienta fundamental en la lucha contra la ciberdelincuencia en el entorno digital.
