Intel ha decidido cesar el soporte de su tecnología Deep Link, una función lanzada en 2022 junto con las tarjetas gráficas Intel Arc Alchemist. Pese a su objetivo de mejorar el rendimiento en gaming, creación de contenido y streaming, la compañía ha optado por discontinuar su mantenimiento. La confirmación fue proporcionada por Zack-Intel, representante oficial de la compañía, quien respondió en un hilo de discusión en GitHub tras una consulta de un usuario sobre la falta de activación en software de streaming.
Deep Link prometía mejorar la sinergia entre CPUs y GPUs de Intel, incorporando funciones como Dynamic Power Share, que optimiza la distribución de energía, y Hyper Encode, que acelera la codificación de video. No obstante, estas características solo beneficiaban a usuarios con procesadores Intel de 11ª generación o superiores y tarjetas gráficas Intel Arc Alchemist, excluyendo a aquellos con componentes de otros fabricantes.
La descontinuación ha causado frustración entre consumidores que adquirieron productos Intel con la expectativa de alto rendimiento gracias a Deep Link. Aunque la funcionalidad sigue operativa, la ausencia de actualizaciones futuras significa que los problemas de compatibilidad con software de terceros no se resolverán, incrementando la incertidumbre respecto al compromiso de Intel con su línea Arc y el desarrollo de software grafico.
El hecho de que Intel no emitiera un comunicado oficial sobre la retirada de Deep Link ha sido interpretado como una falta de transparencia. A medida que los sistemas actualizan sus aplicaciones y controladores, la fiabilidad de una tecnología no mantenida se vuelve cuestionable.
Este movimiento subraya la brevedad de la vida útil de tecnologías prometedoras cuando no logran adopciones significativas. Los usuarios de Intel deben considerar alternativas más estables y planificar actualizaciones con un enfoque en el soporte a largo plazo.
