Un equipo de investigadores, compuesto por las universidades de Granada y Miguel Hernández de Elche, ha realizado un descubrimiento prometedor en la lucha contra el cáncer, al identificar la interacción de dos moléculas, RYBP y PKP1, que podrían tener un papel crucial en la reducción de la movilidad celular y en potencialmente frenar la diseminación de tumores. RYBP, conocida por sus propiedades protectoras contra el cáncer, limita el crecimiento y propagación de células malignas, mientras que PKP1 se asocia con la metástasis, es decir, la propagación del cáncer a otros órganos.
Este proyecto de investigación ha contado con la colaboración de la Universidad de Zaragoza, FISABIO de la Comunidad Valenciana, la Universidad de las Américas de Ecuador, y los Consejos Superiores de Investigaciones Científicas de España e Italia. La investigación ha sido financiada por el Plan Andaluz de Investigación, el Instituto de Salud Carlos III, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, y otras entidades de la Comunidad Valenciana y Aragón.
En el estudio, titulado ‘Unveiling the Binding between the Armadillo-Repeat Domain of Plakophilin 1 and the Intrinsically Disordered Transcriptional Repressor RYBP’ y publicado en la revista ‘Biomolecules’, se describe cómo estas dos proteínas interactúan y cómo su unión podría actuar para frenar el cambio de células cancerosas, dificultando su diseminación. Este hallazgo abre la puerta a nuevas terapias que podrían bloquear la migración de células tumorales y así impedir la metástasis.
La investigación también ha analizado el fenómeno de transición epitelio-mesenquimal, que permite a las células epiteliales convertirse en células mesenquimales más móviles, facilitando la metástasis. Se observó que al unirse RYBP y PKP1, se reduce el número de células que atraviesan este proceso de transición. Según María Esther Fárez-Vidal, investigadora de la Universidad de Granada, y Camino de Juan Romero de FISABIO, esta unión podría convertirse en una diana terapéutica crucial para detener la progresión del cáncer.
Mediante modelos de simulación por ordenador y experimentos de laboratorio, los investigadores observaron cómo estas proteínas interactúan en células de cáncer de mama y pulmón, tanto en el citoplasma como en el núcleo, destacando la importancia de su ubicación y sus funciones en la progresión del cáncer. Aunque todavía se investiga para identificar con precisión todas las partes implicadas en esta interacción, estas proteínas ofrecen múltiples posibilidades para el desarrollo de medicamentos que detengan el avance del cáncer.
Los científicos también han identificado residuos clave dentro de las proteínas que podrían influir en su comunicación, marcando un camino claro para futuras investigaciones dirigidas a controlar esta interacción y su impacto en los procesos celulares que facilitan la diseminación del cáncer.
Fuente: Junta de Andalucía.