Científicos de la Universidad de Córdoba han desarrollado un innovador tapón inteligente para barricas de vino que envía imágenes diarias del velo de flor, crucial en la crianza de vinos generosos como el fino, la manzanilla y el amontillado. Este avance tecnológico ha sido financiado por el Campus de Excelencia Internacional Agroalimentario de Andalucía (ceiA3) en el marco de los proyectos ‘Agromis’ e ‘Innofino’, con el objetivo de impulsar la innovación en el sector agroalimentario andaluz.
Esta técnica enológica, tradicional en áreas como Jerez y Montilla-Moriles, se basa en la formación de una capa de levaduras que aísla el vino del oxígeno y le aporta sabores únicos. Hasta ahora, el control del velo se realizaba manualmente, lo cual era laborioso y arriesgado para los operarios.
El dispositivo, dotado de una cámara y un sistema de procesamiento, transmite las imágenes en tiempo real a una plataforma, permitiendo a los enólogos supervisar el estado del velo desde cualquier dispositivo móvil sin necesidad de desplazarse. La patente, ya concedida, supone un avance significativo en la eficiencia y seguridad laboral, especialmente en instalaciones que emplean el sistema de criaderas y soleras.
El proyecto, liderado por Juan Moreno y Eduardo Cañete, comenzó al identificar la falta de tecnología aplicada a la crianza biológica, desarrollando hasta llegar al modelo actual. El dispositivo, que se ajusta a las características artesanales de las barricas, está equipado con sensores adicionales para monitorear factores ambientales, y funciona con pilas recargables, garantizando hasta dos años de autonomía.
El prototipo ha sido testeado exitosamente en la bodega Pérez Barquero, y aunque está listo para su uso, aún se trabaja en mejorar algunos aspectos estéticos y funcionales. La acumulación de datos permitirá aplicar inteligencia artificial para optimizar el seguimiento y control del proceso enológico, mejorando la calidad y consistencia de los productos.
Fuente: Junta de Andalucía.
