Josep Borrell, Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, ha expresado su preocupación por el posible cierre de la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina (UNRWA) tras la reciente prohibición de sus actividades por parte del Parlamento israelí. Según Borrell, esta medida complica aún más la búsqueda de una solución política al conflicto entre Israel y Palestina y debilita el derecho de autodeterminación de los palestinos. La prohibición podría paralizar las operaciones de la UNRWA en la Franja de Gaza, afectando gravemente a millones de personas, en un momento en que miles están al borde de la inanición. Mientras que Israel acusa a la UNRWA de ser cómplice de Hamás, Borrell enfatiza que la agencia seguirá siendo vital hasta que se logre un estado palestino soberano. La Unión Europea ha condenado la legislación israelí por contradecir el derecho internacional y principios humanitarios.
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