El fallecimiento del Papa Francisco ha generado polémica en Israel, donde el gobierno publicó y luego eliminó un mensaje de condolencia en redes sociales. Esta acción, dictada por el Ministerio de Asuntos Exteriores, responde a anteriores críticas del Pontífice hacia las acciones de Israel en Gaza, calificándolas de «crueldad» y sugiriendo características de genocidio. Mientras el presidente Isaac Herzog envió sus condolencias, el primer ministro Benjamin Netanyahu y otros altos funcionarios han mantenido silencio, lo que ha suscitado críticas internas y dudas sobre la presencia de Israel en el funeral. Raphael Schutz, exembajador israelí, consideró que el silencio podría empeorar la imagen internacional del país.
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