Karlos Arguiñano, reconocido chef español, comparte un truco infalible para freír huevos sin salpicaduras: añadir sal y harina al aceite, lo cual absorbe el agua y evita explosiones sin afectar el sabor del huevo. Este consejo práctico se suma a su vasta trayectoria enseñando a preparar platos tradicionales con maestría. Los huevos fritos, un manjar humilde pero delicioso, cuentan con una rica historia culinaria que data de tiempos antiguos y se popularizó en España desde 1846. Con las técnicas de Arguiñano, cualquier receta sencilla puede transformarse en una experiencia culinaria de primer nivel.
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