Para maximizar los beneficios del entrenamiento físico, es crucial seguir una dieta equilibrada que sea rica en carbohidratos y proteínas. Además, es esencial respetar los períodos de descanso y asegurar una adecuada hidratación mediante el consumo suficiente de agua. Sin cumplir con estos pilares, los resultados deseados pueden no lograrse de manera efectiva.
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