La Feria Nacional de Ganadería y Agricultura, conocida como FEGASUR, que estaba programada para celebrarse del 8 al 10 de noviembre de este año, ha sido pospuesta debido a la incertidumbre generada por la situación sanitaria relacionada con el virus de la lengua azul. La decision, tomada por la Diputación de Cádiz, organizadora del evento, marca un hito importante al ser el vigésimo quinto aniversario de la feria.
El aplazamiento se debe a la preocupación sobre la posible imposibilidad de contar con la presencia del ganado bovino, ovino y caprino, elementos centrales de la exposición. Esta decisión fue tomada tras una reunión con las autoridades sanitarias y representantes de asociaciones de criadores de ganado rumiantes, quienes comparten el deseo de celebrar la feria, pero reconocen las dificultades que plantea la presencia de animales rumiantes en la muestra.
La situación se ha visto complicada por la detección de casos del serotipo 3 del virus de la lengua azul en explotaciones de ovino en la Regíon de Évora, Portugal, así como en Badajoz y Huelva. Este serotipo, que no había sido detectado anteriormente en España, causa cuadros clínicos severos y altas tasas de mortalidad en ovinos. Aunque también afecta a ganado bovino, su impacto es menor en esta especie. Ante la falta de vacunación en la cabaña ganadera andaluza para este serotipo, las autoridades han emitido medidas de control para proteger los animales.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha implementado una serie de medidas que incluyen la creación de una zona restringida de aproximadamente 150 kilómetros alrededor de los brotes detectados y regulaciones sobre el movimiento de animales y vacunación. La Diputación de Cádiz ha elogiado los esfuerzos de las administraciones sanitarias para proporcionar suficientes dosis de vacuna, aunque el proceso de vacunación conlleva un tiempo de espera de 30 días para asegurar la inmunidad de los animales.
La decisión de posponer FEGASUR 2024 responde a múltiples factores, incluyendo la incertidumbre sobre la cantidad de ganado disponible y la posible imposición de medidas restrictivas adicionales que dificulten la consolidación de un evento que atrae a un público interesado en el ámbito agropecuario y otras áreas relacionadas. Los organizadores están conscientes de que la ausencia de ganado podría disminuir el interés del público y afectar las expectativas de los sectores profesionales implicados en la feria.
La lengua azul, una enfermedad transmitida por insectos del género culicoides, no representa un riesgo para la salud humana, pero su impacto en la industria ganadera es significativo. Por lo tanto, la atención se centra ahora en la evolución de la situación sanitaria y en garantizar la seguridad y bienestar del ganado, elemento indispensable para el futuro éxito de la feria.
Fuente: Diputación de Cádiz.