La Diputación de Málaga ha lanzado el I Plan Estratégico de Empleo 2024-2027, una iniciativa destinada a abordar la despoblación de manera integral. Este plan fue presentado oficialmente por el vicepresidente de Desarrollo Económico y Social, Juan Rosas, en un evento celebrado en La Térmica. El acto reunió a diversos actores, incluidos representantes de la Junta de Andalucía, del Ayuntamiento de Málaga, de otras localidades, de la Universidad de Málaga, mancomunidades, grupos de desarrollo rural, organizaciones del tercer sector y empresas.
La diputada de Empleo y Formación, Mª Carmen Márquez, destacó que desde 2003 el Servicio de Empleo de la Diputación ha gestionado numerosos proyectos centrados en la formación, la capacitación, el apoyo al emprendimiento y la sostenibilidad de la actividad económica. Sin embargo, el nuevo Plan Estratégico de Empleo representa un avance significativo, ya que busca coordinar y optimizar los esfuerzos en materia de empleo realizados tanto por la Diputación como por otras instituciones y empresas locales.
Juan Rosas afirmó que en muchas provincias de España, los planes estratégicos de empleo han actuado como motores de desarrollo. En este contexto, resaltó la importancia de fomentar el empleo sostenible y de calidad, especialmente en las áreas rurales, con el objetivo de garantizar la igualdad de oportunidades en toda la provincia.
El Plan Estratégico de Empleo se centra en 45 municipios malagueños que actualmente enfrentan el riesgo de pérdida de población. Este plan no solo coordinará las actuaciones existentes, sino que también buscará atraer inversiones y fondos europeos.
Los ejes de actuación del plan se definen en siete áreas principales:
Ecosistema de emprendimiento: Se busca potenciar la innovación social y apoyar el trabajo autónomo en localidades pequeñas a través de subvenciones, acuerdos con entidades de emprendedores y acciones formativas.
Vertebración territorial: Apunta a fortalecer la colaboración entre distintos agentes clave del empleo para adaptar las políticas a las necesidades del territorio rural y explorar oportunidades en áreas como bioconstrucción y energías renovables.
Impacto en formación y empleo: Este eje se enfoca en crear itinerarios de formación y programas para apoyar a desempleados y a mujeres víctimas de violencia de género, además de facilitar ayudas a la contratación para empresas y autónomos.
Mejora de capacidades: Promover la cualificación continua de los trabajadores mediante talleres, eventos y ayudas, en consonancia con el Pacto por las Capacidades de la Unión Europea.
Transiciones ecológica y digital: Transferir conocimientos y herramientas a trabajadores y empresas para abordar estas transformaciones a través de la formación en competencias digitales y apoyo a emprendimientos sostenibles.
Competitividad productiva: Reforzar la competitividad de los sectores productivos mediante un apoyo más ágil y efectivo a las empresas, incluyendo la promoción de marcas locales.
- Gobernanza participativa: Impulsar un modelo de colaboración y compromiso entre las entidades y agentes relevantes, alineando las acciones con la Agenda 2030 y estableciendo un sistema de seguimiento y evaluación del plan.
El I Plan Estratégico de Empleo cuenta con la participación activa de múltiples áreas de la Diputación, la Junta de Andalucía, los ayuntamientos de la provincia, la Universidad de Málaga, mancomunidades, grupos de desarrollo rural y diversas entidades y empresas. Esta colaboración es fundamental ya que, como indicó Juan Rosas, representa un esfuerzo conjunto sin precedentes para coordinar las iniciativas de empleo en Málaga.
Fuente: Diputación de Málaga.