El presidente Donald Trump consultó a congresistas republicanos sobre la posibilidad de despedir a Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, una posición tradicionalmente independiente debido a su molestia por no bajar los tipos de interés. Aunque llevó una carta de despido, Trump aseguró no haber decidido aún su destitución. Los economistas advierten que un despido podría afectar severamente los mercados. Trump critica a Powell, aunque fue él quien lo nombró en 2017. La controversia surge en medio de especulaciones sobre si Trump intenta desviar la atención del caso Jeffrey Epstein o influir en las decisiones financieras. Las apuestas sugieren un 24% de probabilidad de que Trump lo despida este año. Despedir a Powell sin causa justificada podría ser ilegal, pero Trump usa el aumento en el costo de una renovación de edificios de la Fed como pretexto. Expertos señalan que la pérdida de independencia de la Fed podría llevar a consecuencias como en Turquía bajo Erdoğan, donde la inflación se disparó tras intervenciones políticas en el banco central.
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