Novak Djokovic se apoyó en la red observando cómo Carlos Alcaraz celebraba su victoria en las semifinales del US Open, un momento simbólico donde el joven talento español negó al veterano serbio, de 38 años, la inmortalidad deportiva. Alcaraz, quien mostró una excepcional capacidad para superar el aura de Djokovic, ganó el último set en poco más de media hora, dejando claro el cambio de guardia en el tenis. «Djokovic siempre es complicado, no solo por su juego, sino por su presencia», expresó Alcaraz, reconociendo la dificultad de enfrentar a un mito. Sin embargo, la energía y el tenis del murciano brillaron, superando a un Djokovic agotado. Alcaraz se prepara para su séptima final de Grand Slam, esperando con calma al posible rival, Jannik Sinner.
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