La Universidad de Valencia decidió cancelar las clases el pasado 29 de octubre, durante la DANA, basándose en la información proporcionada por Emergencias de la Generalitat Valenciana. Esta decisión se detalla en un informe remitido al Juzgado de Instrucción 3 de Catarroja, liderado por la jueza Nuria Ruiz Tobarra. Aunque la jueza critica la inacción de la Generalitat, el informe universitario subraya la utilidad de la información de Emergencias, que permitió anticipar medidas preventivas, como la declaración de nivel 1 de emergencia. El análisis del contenido en redes sociales y avisos meteorológicos, especialmente de AEMET, fue esencial para elevar a nivel 2 de emergencia, considerando el máximo riesgo que afectó principalmente a la provincia de Valencia el día del fenómeno climático.
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