En la tradicional corrida del Domingo de Resurrección en la plaza de la Maestranza, el diestro Daniel Luque logró cortar la única oreja de la tarde, destacando por su maestría y técnica al lidiar con toros difíciles, especialmente con el tercero y el sexto. Morante de la Puebla, en su regreso al ruedo sevillano, mostró destellos de toreo clásico aunque sin suerte con la espada, lo que limitó su reconocimiento. Alejandro Talavante tuvo una actuación discreta, sin lograr elevar sus faenas pese a su esfuerzo. La plaza, llena en una fresca tarde primaveral, fue testigo de una emotiva interpretación musical en honor al difunto maestro Paco Camino y vivió momentos tensos tras el fallecimiento de un espectador durante el evento.
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