Marc Márquez demostró su dominio en el Gran Premio de las Américas al lograr la pole position y ganar la carrera sprint a pesar de haber sufrido una caída en los entrenamientos. Durante la primera vuelta de la prueba corta en Austin, Márquez protagonizó una intensa disputa con su compañero Pecco Bagnaia, intercambiando posiciones en varias ocasiones. Finalmente, Márquez estableció un ritmo imparable para dominar la competencia, mientras Álex Márquez, su hermano, aseguró un segundo lugar con su Ducati satélite. A pesar de algunos errores, la jornada dejó a Marc Márquez en la cima, reafirmando su conexión con el circuito texano, donde ha sido casi imbatible desde su debut en la categoría reina en 2013.
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