El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha instado a los países aliados a aumentar significativamente su gasto en defensa, en vísperas de la cumbre de la Alianza en La Haya. Estados Unidos propone elevar el objetivo al 5% del PIB, sugiriendo que 3,5% se destine a defensa directa y 1,5% a seguridad ampliada. Aunque Rutte no ha oficializado cifras, destacó que el gasto debe superar el 2% acordado en 2014. España, Italia, Luxemburgo y Eslovenia han alcanzado este porcentaje recientemente. La reunión en Turquía, en presencia de ministros extranjeros y la ausencia del presidente ruso, ha sido crucial para planificar un consenso ante temores de desvinculación de EE.UU. Varios países han mostrado disposición a seguir el plan de incremento estratégico propuesto.
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