La instalación de sistemas de aerotermia se posiciona como una opción cada vez más atractiva para los hogares en España, al permitir un ahorro energético significativo. Estudios indican que esta tecnología puede ahorrar entre 300 y 400 euros anuales en consumo energético, mientras ofrece un confort térmico superior.
La aerotermia aprovecha la energía acumulada en el aire para proporcionar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria. Basada en principios de eficiencia energética, convierte el aire exterior en energía aprovechable, lo que reduce la dependencia de combustibles fósiles y disminuye las emisiones de carbono.
Expertos destacan que más allá del ahorro económico, la aerotermia contribuye a la sostenibilidad ambiental, alineándose con iniciativas para mitigar el cambio climático. La preocupación por el alza de tarifas energéticas y la necesidad de medidas ecológicas han motivado a muchos a considerar esta alternativa.
El auge de la aerotermia ha sido impulsado por subvenciones y programas de incentivos gubernamentales, diseñados para facilitar la transición hacia fuentes de energía más limpias y eficientes. Esta política ha beneficiado a propietarios individuales, comunidades de vecinos y empresas interesadas en modernizar sus instalaciones.
Con el avance tecnológico y la accesibilidad creciente de estos sistemas, la aerotermia surge como una solución viable para quienes buscan combinar eficiencia económica y compromiso ambiental. Con la llegada del frío, muchos hogares están considerando adoptar estas innovaciones, en busca de ahorro y mayor confort.
