Cadence Design Systems, una de las principales empresas estadounidenses en el sector de automatización del diseño electrónico (EDA), ha admitido ante un tribunal federal haber violado las leyes de control de exportaciones. La firma aceptó haber vendido software para el diseño de chips a la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa (NUDT) de China, institución vinculada al desarrollo de armamento nuclear.
La NUDT, localizada en Hunan, está incluida en la «Entity List» del Departamento de Comercio de EE. UU. desde 2015, lo que impide exportar tecnología sin una licencia especial. Sin embargo, Cadence y su filial en China realizaron al menos 56 entregas de software EDA a una organización llamada CSCC, utilizada como alias por la NUDT para evadir sanciones. Documentos judiciales revelan que empleados de Cadence China estaban al tanto de este subterfugio. Además, la compañía vendió productos a Phytium Technology, una empresa china con vínculos estrechos con la NUDT, sin las licencias obligatorias.
Cadence reconoció su culpabilidad en la conspiración para violar las regulaciones de control de exportaciones y deberá pagar 140 millones de dólares en sanciones. Además, estará bajo probación durante tres años, limitando sus operaciones con entidades sancionadas. Cualquier nueva infracción podría acarrear penalizaciones más severas, incluida la prohibición total de exportar productos sensibles.
Este caso es la mayor infracción admitida por una empresa tecnológica estadounidense en relación con el régimen de sanciones de Washington contra China. Podría marcar un precedente para futuras medidas regulatorias. Paralelamente, otras empresas como NVIDIA también están bajo investigación por el contrabando de GPUs prohibidas hacia China.
El endurecimiento de las exportaciones tecnológicas a China forma parte de una estrategia de contención de su capacidad militar e inteligencia artificial, percibidas por EE. UU. como amenazas a su seguridad nacional. Washington también ha instado a aliados como Singapur y Malasia a colaborar en la restricción de rutas de contrabando.
Pese a que EE. UU. levantó recientemente la prohibición general sobre exportaciones de herramientas EDA, las restricciones se mantienen para entidades en la lista negra como la NUDT. Por lo tanto, las empresas deben solicitar licencias específicas para hacer negocios con dichas instituciones.
La multa a Cadence subraya las consecuencias económicas y reputacionales de ignorar los controles estratégicos, enviando un mensaje claro al sector en un contexto de creciente tensión tecnológica y geopolítica. Las firmas de diseño electrónico y semiconductores se enfrentan ahora a un panorama más delicado y regulado.