El transporte de mercancías por carretera en España movió más de 1.600 millones de toneladas el año pasado, un sector vital para el cual los conductores profesionales deben contar con una tarjeta digital que registre tiempos de conducción y descanso. La Guardia Civil realiza controles preventivos y, en febrero, detectó a un matrimonio en León usando tarjetas digitales intercambiadas para eludir descansos. Estos están siendo investigados por falsedad documental, sancionable con penas de prisión y multas. Además, según la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, podrían enfrentar multas de 2.001 a 6.000 euros por la falta muy grave de uso indebido del tacógrafo. El Certificado de Aptitud Profesional (CAP) es obligatorio para conductores que transportan mercancías o pasajeros en la UE, acreditando que han completado la formación necesaria para operar conforme a la normativa vigente.
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