El arzobispo de Madrid, José Cobo Cano, de 59 años, es uno de los seis cardenales españoles que participa en el cónclave para elegir al sucesor del Papa Francisco. A pesar de su juventud relativa, Cobo se destaca por su cercanía a las posturas progresistas del actual Papa, abogando por reformas en la Iglesia, incluyendo la gestión de abusos sexuales. En el cónclave, Cobo enfatiza la diversidad y el diálogo como pilares para definir el futuro papado, destacando la necesidad de una Iglesia relevante para un mundo en crisis. Aunque no considera prioritaria la elección de un Papa por su lugar de origen, subraya la relevancia de la persona y su capacidad para enfrentar desafíos actuales como la comunicación en la era digital y la unidad interna. Cobo invita a aceptar y continuar las reformas iniciadas por Francisco, viendo en el próximo Papa un líder que no se quede atrapado en el pasado, sino que afronte creativamente los retos del futuro.
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