La Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado nuevas cámaras en Madrid para mejorar la seguridad vial, detectando no solo excesos de velocidad, sino también infracciones como pisar líneas continuas, incorporaciones indebidas, y la invasión de arcenes. Equipadas con inteligencia artificial, estas cámaras identifican y envían imágenes de posibles infracciones a un centro de control para su verificación antes de gestionar multas de hasta 200 euros, aunque, por el momento, sin pérdida de puntos. Actualmente hay cuatro cámaras activas en zonas críticas, y se planea expandir este sistema a toda España para reducir accidentes y mejorar el cumplimiento de las normas de tráfico.
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