Seúl / Silicon Valley. En un destacado desarrollo dentro de la industria tecnológica, Samsung ha logrado finalmente incorporarse oficialmente a la cadena de suministro de HBM para NVIDIA. Después de enfrentar meses de retos técnicos y rumores, la empresa surcoreana ha recibido un pedido de pilas HBM3E de 12 alturas (12-Hi) para las soluciones Blackwell Ultra a escala de rack (GB300) de NVIDIA. Este logro marca un triunfo significativo para Samsung y altera el panorama de proveedores dominado anteriormente por SK hynix y Micron.
Este movimiento estratégico significa, a nivel técnico, que Samsung ha superado los complicados obstáculos de calificación que le habían impedido ser parte de los pedidos «core» de NVIDIA hasta ahora. Esto no solo representa un avance técnico, sino también una diversificación de riesgos para NVIDIA, especialmente en un contexto donde la memoria HBM es crucial para el escalado del cómputo de inteligencia artificial.
El acuerdo, prácticamente confirmado según medios coreanos, implica que Samsung ahora forma parte del «core program» de HBM de NVIDIA, superando retrasos de certificación previos. Este escenario ofrece a Samsung un respiro, especialmente cuando SK hynix dominaba el mercado y Micron avanzaba rápidamente con su propia tecnología.
Curiosamente, también se menciona la posibilidad de un acuerdo recíproco en el que Samsung podría adquirir alrededor de 50.000 GPUs de NVIDIA. Este movimiento no solo fortalecería la transformación interna de Samsung en IA, sino que también podría facilitar la colaboración en futuros proyectos estratégicos, como el datacenter de IA en Pohang.
A pesar de que el foco ya está en la nueva generación de HBM4, la elección de HBM3E sigue siendo estratégica. Mientras HBM4 avanza sus cualificaciones para el 2026, Samsung capitaliza en el presente con HBM3E, posicionándose advantageosamente para el futuro.
Para el ecosistema, la entrada de Samsung aporta diversidad y resiliencia. Tres fuentes de suministro reducen riesgos, permiten negociar precios y aceleran la capacidad en momentos de alta demanda en el sector de IA.
Observadores de la industria deben estar atentos a los detalles próximos: plazos de suministro, hojas de ruta de HBM4, posibles compras recíprocas de GPUs y cómo se reflejarán estos movimientos en los costos y márgenes de los aceleradores Blackwell Ultra.
El camino hacia 2026 promete un escenario más abierto, donde NVIDIA y Samsung, junto a otros jugadores, definirán el ritmo de la siguiente etapa en el cómputo de inteligencia artificial.