Con la llegada de octubre, el mundo de la decoración adopta una nueva paleta de colores que marcará tendencia en los próximos meses. Expertos en diseño interior han identificado ocho tonalidades que no solo prometen refrescar los espacios, sino que también responden al deseo creciente de personalización y conexión con la naturaleza.
El verde oliva es el primer color destacado, evocando tranquilidad y armonía. Este tono se ha vuelto especialmente popular por su capacidad de combinar con materiales naturales como la madera y el yute, promoviendo espacios acogedores y equilibrados.
Le sigue el terracota, un color cálido y terroso que aporta una sensación de confort y cercanía. Ideal para ambientes rústicos, se ha vuelto un favorito en combinaciones con textiles suaves y muebles de líneas sencillas.
El azul profundo también se proyecta como clave. Este color, que recuerda a los océanos y cielos nocturnos, es perfecto para aportar un aire de sofisticación. Puede usarse en paredes o como acento en decoraciones.
Otro color en auge es el amarillo mostaza, vibrante y lleno de energía. Es ideal para detalles como cojines o cuadros, y anima estancias al contrastar con tonos más neutros.
Asimismo, el gris pizarra sigue presentándose como un clásico moderno, ofreciendo una base sólida y elegante que combina con casi cualquier otro color. Su versatilidad lo hace excelente para muebles y revestimientos.
El rosa empolvado, por su parte, aporta suavidad a los espacios, ideal para ambientes serenos y femeninos. Este color es especialmente atractivo en dormitorios y salones, con un aire de romanticismo y calidez.
El burgundy, un rojo profundo y cálido, es ideal para espacios de entretenimiento, atrayendo la atención y estimulando la conversación. Puede emplearse en paredes, tapicería o elementos decorativos para un toque de sofisticación.
Finalmente, el color arena permite crear ambientes relajantes y equilibrados. Su neutralidad lo hace perfecto para combinar con otros colores, favoreciendo un estilo más ecléctico y acogedor.
Este espectro de colores refleja una tendencia estética y un enfoque hacia la creación de espacios que fomenten el bienestar y la conexión emocional. A medida que los días se acortan y el clima se vuelve más fresco, interioristas y amantes de la decoración se preparan para implementar estas tonalidades, marcando así el estilo del hogar en esta temporada otoño-invierno 2023.