Grigori Sokolov, pianista de 74 años originario de Leningrado, ostenta un misterio que se despliega a través de su música, considerada por muchos como la mayor expresión pianística viva. Nacionalizado en España, Sokolov impresiona en cada presentación con interpretaciones legendarias de compositores clásicos como Bach y Beethoven. Su dedicación al instrumento es total, ensayando hasta nueve horas diarias cuando se acerca un concierto. La carrera de Sokolov despegó globalmente tras la caída del Muro de Berlín, manteniéndose en la élite musical con una existencia dedicada al arte de forma monástica. Su historia refleja una vida entregada al piano, cautivando al mundo con su dominio excepcional y reservada personalidad.
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