La oficina de la ONG danesa Global Aktion en Copenhague fue completamente destruida por un incendio provocado, acto vinculado a su labor en favor del pueblo saharaui y la denuncia de la ocupación marroquí del Sáhara Occidental. La organización denunció la agresión como un intento de silenciar su activismo a favor de los derechos humanos y resaltó que no cejarán en su apoyo a la independencia del Sáhara. El ataque ha sido condenado por el Frente Polisario, que lo enmarca dentro de una campaña de Marruecos para reprimir la disidencia y extender el conflicto más allá de sus fronteras. La violencia contra Global Aktion subraya el continuo desafío de Marruecos a las críticas internacionales por sus acciones en el Sáhara.
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